domingo
sábado
De conciertos
El problema que he tenido habitualmente es que los grupos que me gustan son de los que hacen pocos conciertos: o son viejos o están separados.
Pero desde hace un año estoy asistiendo a los mejores conciertos de mi vida. ¿Cómo olvidar aquel magnífico Getafe Electric Festival, en el que oí a dos de mis grupos preferidos: Metallica y Rage Agains the Machine, además de otros fantásticos músicos como Sepultura (bueno, Cavalera Conspiracy) o Serj Tankian? Simplemente fantástico.
Pues este año se presenta incluso mejor. Dejando aparte pequeños conciertillos a los que he ido yendo, como el de Pain, lo importante está por llegar. Para empezar, la semana que viene me voy una semana a Zaragoza al Metalway en el que veré grupazos como Motörhead o Manowar, amén de muchos grupos más. Además dentro de un mes asisitiré en Barcelona al Sonisphere, en el que volveré a ver a los grandiosos Metallica junto con grupos muy interesantes. Además de todo ésto en noviembre seguramente vaya a ver a Rammstein, también en Barcelona.
Lo único que me da un poco de lástima es no poder haber ido a los recientes conciertos de AC/DC, pero bajo ningún concepto pago yo 75 eurazos por un solo concierto. Me da igual que sea el mejor grupo del mundo o su puta madre y también me da igual toda la puesta en escena que hagan. Es un robo a mano armada y la única forma de protesta es la no asistencia. Me averguenza que grupos tan importantes para nuestras vidas se aproveche de su fama para vaciarnos las carteras. Es una lástima, y estoy seguro de que irán al cielo con todos los pederastas y los dictadores, mientras yo me monto orgías en el infierno con los músicos de verdad.
Y por supuesto, después de cada festival o concierto al que vaya escribiré un posts contando cómo ha ido todo al estilo de lo que hice con el Getafe Electric Festival. A no ser que me de pereza.
De hogares
Todo ésto me ha hecho reflexionar sobre algo. En los últimos tres años he vivido en cuatro habitaciones distintas. Acostumbrado a vivir dieciocho años en la misma habitación se hace muy extraño cambiar tanto. Es como si no pudieras llegar a llamar hogar a ningún sitio por que en cuanto empiezas a acomodarte en un sitio ya te tienes que marchar, no puedes conocer un barrio, por que no vas a durar mucho en él. Además de todo esto creo que por mucho tiempo que pase en un lugar, mi verdadero hogar siempre estará allí donde viví casi toda mi vida, exactamente aquí:
Ver mapa más grande
Últimamente, como siempre que paso mucho tiempo seguido fuera de casa, me empieza a invadir la melancolía de mi tierra.Y lo que más me entristece es que cada año que pasa yo me alejo más de ella: cada vez paso menos tiempo en casa, con la familia, los amigos de toda la vida y con mis perros. El primer año que estuve fuera de casa más o menos volvía al menos un fin de semana cada dos meses. El segundo año apenas estuve en casa más que una semanita por Navidad, un par o tres de días en Semana Santa y todo el verano. Pero este año, el tercero, voy a estar a lo sumo un mes en todo el año. Cosas del trabajo. Es como si mis raíces mallorquinas se estuvieran pudriendo para dejar paso a nuevos brotes catalanes: cada vez tengo menos contacto con mi familia, mis amigos de toda la vida han econtrado nuevos amigos y yo también, y aunque seguimos viéndonos ya no es lo mismo; mis perros me ladran cuando a vuelvo a casa, como si fuera un intruso; mi vieja habitación está llena de trastos viejos; no recuerdo el nombre de algunas calles en Palma y ya empiezo a orientarme en Barcelona, y hasta me dicen que tengo acento catalán cuando hablo.
Todo cambia, Mallorca ha cambiado desde que no estoy allí como una vida ahora resquebrajada, y yo he cambiado desde que estoy en Barcelona. No se pueden llevar dos vidas, hay que elegir. Y parece que yo lo he hecho.
viernes
Repetimos

Ayer fuimos a cenar y después a tomar unas birras con unos colegas. Allí encontramos a un colega de la universidad y nos fuimos con él a una discoteca de rock llena de viejos que estaba a tomar culo. La gente se fue pirando y a las cinco de la mañana solo quedábamos Carlos y yo. Entonces empezamos a caminar hacía una parada de metro lejana.
Íbamos por una calle desierta. Me paro para atarme los cordones y cuando levanto la vista veo que un chaval está agarrando a Carlos de la camiseta. Me acerco para ver que pasa. Me agarra a mi también. Me pide tabaco. Tranquilo, le digo que no me queda. Entonces me dice que saque todo lo que lleve. Le digo un contundente NO. Entonces intenta pegarme (soltando a Carlos), pero es muy lento y para su golpe sin problemas. Cuando me giro veo a Carlos en modo berserker que le suelta una buena ostia. Aquí empiezan los golpes, y el chaval se llevó unos cuantos. Yo, pacífico como siempre, intentaba solo empujarle para que no pudiera pegar a Carlos. Entonces el chaval amenaza con sacar una navaja (dudo mucho que la tuviera), y nos piramos. Nos fuimos con la dignidad y la cartera intactas.
Unos días se pierde y otros se gana.
sábado
Noches
Quedamos en el Valhalla (que no es el mismo Valhalla de Mallorca). Fue una decisión táctica: para hacer una cerveza es mejor quedar en otros sitios con más luz y menos ruido, pero el Valhalla casi no tiene luz y la música está altísima. Condicionamiento subliminal. Así que después de la segunda cerveza a Carlos le entraron ganas de ir al Metal Zone, pero antes había que ir a emborracharnos.
Llegamos a Marina y la primera parada fue el bb+ dónde nos bebimos un cubalitro ron-cola y unos osos cavernarios... quiero decir mataosos. Hablamos con la dueña acerca de que ahora la policía quiere cerrar todos los bares de la zona por que quieren construir edificios de viviendas y, lamentablemente, parece que lo están consiguiendo.
Ahora ya estabamos listos para metal extremo (esa era la temática de ayer). Cuando llegamos el Metal Zone estaba casi vacío, los viernes casi no hay gente, pero cuando avanzó la noche la cosa no estuvo tan mal. Recuerdo que en un determinado momento Carlos fue a pedir una canción (aunque sabe que nunca se las ponen), la cosa fue algo así:
-Carlos: ¿Podéis poner Amon Amarth?
-DJ, sonriente: Está sonando Amon Amarth ahora mismo.
-Carlos, rojo de verguenza: ¿Podéis poner The pursuit of vikings?
DJ, pedante: ¿No estás cansado de escucharla?
Para los que no vayan mucho al Metal Zone, The Pursuit of Viking es una canción muy típica, la ponen casi siempre; y casi tiene más fama la canción que el grupo. Es como si en un determinado momento estuviese sonando Beautiful People de Marilyn Manson (Q.P.D.) y fueséis a pedir Sweet Dreams. Si no le pilláis la gracia ni con esa perfecta analogía que os den por el agujero oscuro.
Más tarde se me planteó una situación vital. Carlos estaba ya completamente borracho y yo estaba borracho (a secas). Recuerdo pensar llegar a ese punto donde siempre me paro. Hace años que aprendí a reconcer ese punto, el punto a partir del cual pierdo el control. En general no paso ese punto (aunque lo hice el viernes pasado). Recuerdo tomar la decisión consciente de pedir un cubata... y después no recuerdo nada más. Tengo flashes de pedir birras para mantener el nivel, o estar fuera con Carlos vomitando y yo con un cubata en el bolsillo. Sí, en el bolsillo, con vaso y todo; y no se derramó.
Acabó la noche, nos comimos las patatas de rigor y para casa. Me he despertado a las tres encima de la cama (y no dentro, como debería ser) totalmente vestido y con la luz encendida.
Por cierto Carlos, la canción que no se nos quitaba de la cabeza en el metro hacia Marina es Stabbing the drama de Soilwork. Los veremos en directo en el Getafe Electric Festival dentro de dos semanas.
lunes
Música en vivo

Me despierta el teléfono. Las cinco de la tarde. Es Carlos. Me dice de ir con un amigo suyo a un bar de música en vivo. Ducha y a la calle. Al llegar veo que es el JazzSí. Estuve un jueves en que tocaban música cubana y, aunque no es mi estilo, me gustó el sitio.
Esperamos hasta que abren a las seis y media. 5€ la entrada con una birra. Encontramos un buen sitio delante del escenario antes de que la cosa se llene. Aparecen por sorpresa un par de amigos más. Disfrutamos de buen rock en directo, algo de pop-rock, algo de blues, algo de country. Los músicos van rotando y se escuchan algunas joyas. Ambiente genial y bebida a buen precio. Tres horas y media que han pasado como el viento. Al final conocemos a tres chicos que, cena de por medio, nos llevan al Big Bang. Por el camino tenemos dos bajas y acabamos siendo seis.
El Big Bang no lo conocía. Entrada libre, aunque es recomendable consumir algo.Una barra, un billar y más alla una sala dónde tocan. Muchos de los músicos que estaban el JazzSí ahora los vemos aquí. Mucha más participación del público, te invitan a subir a tocar. La música más rockera, algo de hard rock y hasta heavy (Iron Maiden, oh yeah). Más de mi estilo. He disfrutado como un cerdo.
A la una nos echan. El metro está cerrado, me espera una hora de camino sin tabaco ni música (maldita batería), pero nada puede empañar ya este día. Hacía tiempo que no me lo pasaba tan bien. No hay nada como la música en directo.
viernes
Post-Navidad
Buenas noches a todos. Para empezar aclarar que ahora mismo estoy borracho. Bueno, casi siempre que escribo algo en este blog estoy borracho. Es más, casi siempre estoy borracho, pero eso no viene a cuenta ahora.
Hace días que tengo la idea de escribir un post navideño, al igual que cada año desde que este blog empezó sus andadas. Las navidades se podrían resumir en el semáforo: Verde, rojo y oro. Ahora mismo no tengo ni tiempo ni ideas para analizar el por qué de esos colores concretos, pero es así.
Otro resumen válido de estas fiestas en general es el consumismo asqueroso y la hipocresía, pero tampoco tengo tiempo de despotricar contra la humanidad en general, así que dejemos esas cosas para otro día.
Este año y estas fiestas en mi vida se podrían resumir en currar (como casi siempre) y en las pocas vacaciones que he tenido me han “obligado” a ir a bastantes compromisos familiares aburridos aunque vastamente saciantes. Además he aprovechado los pocos días en mi tierra para ver a algunos, que no todos, de mis amigos. Familia y borracheras es una mala conjugación y mi madre ha acabado con un cabreo memorable. Otro día os contaré la aventura del aeropuerto.
Al volver hoy de las vacaciones navideñas he tenido que currar (todo tranquilo) y después reunión y después birras, la cosa se anima, y después cena y para acabar marcha. Tres “jovencitos” borrachos en una discoteca condal. Empecemos sinceramente: Soy gilipollas. A partir de ahora lo reconoceré ante el mundo: Soy gilipollas. Explico la situación.
Discoteca. Guay. Borracho. Guay. Aunque en teoría no se puede fumar tengo un pitillo colgando de labio. Pero el Zippo está gastado. Aprovechando que hay que pedir fuego, se lo pido a una chica interesante.
-¿Tienes fuego?- Pido, alzando el piti sobre mis labios.
-Tendrás que darme algo a cambio- Propone la chica mona.
Sonrío y incinera el extremo de mi cigarrillo. Ahora es cuando cualquier persona normal actuaría. Pero no olvidemos que yo soy gilipollas, así que me limito a decir:- ¿Qué propones?
-Se original.- Dice ella, sonriente.
Y yo, cada vez más consciente de mi gilipollez, la invito a ella y a su amiga a un chupito. La chica se resigna, se bebe el chupito, y no la vuelvo a ver en toda la noche.
La noche no puede ir peor en la disco, aunque tampoco va del todo bien, que digamos.
Vuelvo a casa en metro a esa hora en que no se sabe si es pronto o tarde. Nada destacable hasta el portal de mi casa donde, ya separado de mis amigos, se me acerca un individuo. ¿Individuo? La verdad es que es un travesti. A mí me da igual, soy una persona con pocos prejuicios. Me pide un cigarrillo y yo se lo doy. Me pide fuego y le digo que está gastado. Entonces rompe todos mis esquemas diciendo: “¿Tienes la polla gorda? Te la chupo gratis.” Cierro el portal en su cara negando con la cabeza. Antes de entrar en el ascensor miro hacia atrás pero ya no está.
Como curiosidad; sí, la tengo gorda.
domingo
Varios
Ya tengo "móvil", por llamarlo de alguna manera. En realidad es una pda con móvil. No es último modelo, pero está de puta madre y relativamente barata. Tiene pantalla táctil, teclado deslizante, móvil, wifi gprs y muchas cosas más. Ahí os dejo una foto del trasto:

El tema de la encuesta. Sin duda alguna un fracaso. No pasa nada, otra vez será.
Y para acabar, ayer fui al salón del manga.

Fue muy chulo. Realmente podías encontrar cualquier cosa si buscabas bien. Además la gente de puta madre, mucho friki y cosplayer. Muy divertido.
Quejas:
La comida. El chiringuito de comida japonesa estaba llenísimo así que ni me lo planteé. La zona de bocatas era muy cara y una mierda. Nueve euros por un bocadillo sosillo, una birra mala y unas patatas pasadas.
La otra queja es que en la zona de videojuegos sólo había XBOX360 con tres o cuatro juegos. No me digné a coger un mando.
Todo lo demás estuvo de puta madre. Un rato agradable y unas risas.
jueves
Tías (Curro)

Hace un par de semanitas que he empezado con el nuevo curro. La verdad es que es un curro que me encanta. Tiene un horario muy flexible que encaja perfectamente con el de la universidad, muy buen ambiente entre los compañeros, diversión (whisky y porros en cantidades épicas) y contacto con muchos estudiantes (y profesores) de la universidad, a saber: Telecos, caminos, obras públicas (que comparte web y parte del nombre con caminos), informática y algún que otro despistado de arquitectura.
En estas dos semanas de curro he descubierto un par de cosas interesantes. No era ninguna novedad que informática es la carrera en la que hay menos porcentaje de tías. Como no podía ser de otro modo, es la carrera en la que estoy yo. En estudios recientes realizados en esas soporíferas horas muertas mirando diapositivas he podido constatar que el porcentaje suele estar entre el 5% y el 10%. Más o menos quiere decir dos o tres tías por clase, como mucho cuatro. La primera observación interesante es que en telecos, una carrera casi tan friki como la nuestra, el porcentaje de chicas es muy superior. Lo que más me ha impactado es que en obras públicas hay muchas mujeres. Hasta se acerca al 50%. Pero no sólo éso, están casi todas muchas más buenas que las nuestras.
Indignante. Hasta estoy pensando en cambiarme de carrera. Ni si quiera se que hacen en obras públicas pero, ¡joder, mi vida sexual corre peligro!
Para acabar, tengo que decir que es mucho más difícil atender a alguien cuando lleva un escote hasta el ombligo. Si ya me cuesta mucho mirarle a la cara (¡y que cara!), imagínate pensar en asignaturas, libros, precios, descuentos, estanterías, número de socio, dinero y cambio.

Vale, vale... ya acabo... Solo que si tenéis cualquier queja, podéis enviar una carta de reclamación a la punta de mi polla, que es quien ha escrito el artículo. Los datos son:
c/paquete, 69, bajos. Barcelona, 08666. SPAIN
lunes
ELPAIS.com - La Generalitat fija en 9 euros diarios el canon que estudia imponer a las casas vacías - Economía
Bueno, teniendo en cuenta lo que escribí hace pocos días (Barcelona), pues confieso que voy a tener que tragarme las palabras. Catalunya hace algo positivo digno de mención.
Esperemos que esta iniciativa llegue a buen término, y que esto ayude a que disminuya el número de casas desocupadas, cosa que probablemente hará que el precio de la vivienda baje.
Felicidades desde Domheid.
viernes
Barcelona
Este artículo trata de una ciudad. Una de las mejores ciudades por las que he pasado (y no son pocas). La ciudad en que me hubiera gustado vivir. Y no la ciudad que es ahora. Hace poco volví a pasar y hablé con gente. Y la gente estaba enfadada, y cuando les oí me enfadé yo también, pues están convirtiendo a golpe de ley absurda mi ciudad de los sueños en una ciudad como cualquier otra.
Pero, ¿qué hace a Barcelona una ciudad tan especial? Una parte muy importante es la arquitectura, el cuerpo de la ciudad. Esos bellos edificios modernistas del Eixample, el barrio gótico con sus callejones oscuros y llenos de secretos, la magia de la rambla, el interesantísimo barrio del Raval.
Por encima de todo eso está lo más importante, el corazón de la ciudad, la gente. Barcelona es una ciudad multicultural llena de contrastes y de convivencia. Al ser una ciudad donde hay mucha inmigración y turismo, la gente está acostumbrada a otras culturas y al respeto mútuo. Puedes ver los típicos turistas con sus gorros mejicanos, inmigrantes pakistanies vendiendo cerveza o bollos por la calle, gente mayor hablando en los bancos, anarquistas con sus rastas y ropa de rastro, mucha gente montando en bici, las estatuas de la rambla (las mejores del mundo), estudiantes universitarios con las carpetas coloridas, niños de papá con sus coches nuevos bajando de Pedralbes, heaviatas comprando con sus chupas comprando discos en Tallers o gente normal simplemente paseando sin destacar. Todos conviven en Barcelona sin demasiados problemas. Siempre ha sido así. Otra de las cosas buenas de la ciudad es la noche, con su multitud de opciones, pero siempre diversión, ante todo diversión; pues Barcelona siempre ha sido una ciudad joven.
Ahora hablemos de lo que está fallando en esta ciudad. El cerebro. Los políticos incompetentes y políticamente correctos que con sus “leyes cívicas” están destruyendo el alma de esta maravillosa ciudad:
Empezaron con la famosa Ley Cívica, que entre otras cosas prohibía el beber en la calle. Como idea no está mal, pero no puedes destruir una de las formas de diversión más arraigadas en la juventud y no dar alternativas. Nos quitan una forma barata de ocupar la noche y que esperan, ¿Qué nos quedemos en casa? ¿Que vayamos de caras discotecas?
Después hicieron una importante actuación policial contra los pintores de graffitis. Estoy de acuerdo en que el gamberrismo está mal, pero aquello era arte. Realmente se podían encontrar verdaderas perlas, pues Barcelona tenía algunos de los mejores pintores del mundo. Puede que si en lugar de perseguir hubieran legalizado (en zonas concretas, obviamente) esta práctica, no hubieron espantado a muchos artistas.
-Mirad que preciosidad de graffiti. La página original es esta.-
Otras famosas actuaciones policiales realizadas en Barcelona son la desocupación de casales okupas. Entre ellos había centros sociales donde podías ir a aprender, teatros y otros lugares artísticos. De acuerdo la propiedad no es suya, pero el dueño no la utiliza y que hay mejor que otros den un buen uso (para la sociedad) a un local desocupado.
Después también fue conflictiva la regulación ciclista que hicieron. Básicamente están dificultando mucho más la práctica, ya de por si peligrosa, de ir en bici. Algo que es muy bueno para una ciudad, para el medio ambiente y para la gente (que un poco de ejercicio no viene mal). En lugar de impulsarlo, lo reprimen. Muy bien, chavales.
Y, para colmo de males, ahora “intentan” regular las famosas estatuas de la Rambla. Realmente son gente trabajadora que le da un punto bohemio y gracioso a una de las ramblas más famosas de la ciudad. Incluso la mayoría de ellos están de acuerdo, como muestra de buena voluntad y cooperación con las autoridades, en pagar un impuesto por trabajar en la calle, pero no quieren quedarse sin trabajo. Pues con esta medida que dificulta mucho su trabajo lo único que van a conseguir es espantarlos y que se busquen trabajos normales, que no están tan mal, si lo que quieres es una ciudad “normal”.
Espantando y haciendo enfadar a las estatuas, los artistas, los jóvenes, los okupas y los ciclistas lo que les va a quedar es una ciudad como cualquier otra, puede que con un buen cuerpo, pero con el alma dormida en una comodidad gris y el cerebro conforme con una vida monótona.
A mucha gente puede que le parezca lo más cómodo, pero si esto sigue así, puede que no vuelva a pisar la que fue la ciudad de mis sueños. Y eso es una cosa muy triste.
sábado
Noticia – Disturbios en los botellones
Cualquier persona de este país se habrá enterado de los macrobotellones convocados ayer en muchas ciudades de españolas. En la mayoría funcionó bien, pero el las dos principales -Madrid y Barcelona- se preparó un gran dispositivo policial, para defender sus respectivas leyes de civismo. Por la noche hubo disturbios.
Yo quiero defender el botellón.
Se podrían habilitar grandes zonas alejadas de las zonas residenciales para realizar el botellón. Se podrían poner fuerzas de seguridad para el control y servicios médicos para los accidentes. Un servicio de buses también ayudaría. Y se podrían poner establecimientos de comida y bebida que seguramente saldrían muy beneficiados. Más adelantes se podrían poner carpas con música cobrando una pequeña entrada -uno o dos euros- o realizar conciertos en directo de grupos locales. Y ya está, tendríamos nuestra fiesta alternativa a las discotecas y bares de 5€ la copa. No tendríamos por qué hacer botellón en la calle molestando a los vecinos y ensuciando la vía pública. Al gobierno no le costaría tanto financiar esto y a lo mejor hasta saldrían ganando.
Pero bueno, el gobierno nunca haría algo así. No suelen pensar en los jóvenes. Nosotros queremos divertirnos, tenemos que divertirnos. Pero no quieren entendernos, ellos solo quieren asegurar su tranquilidad (a nuestra costa) y poder dormir en silencio todas las noches para ir a sus asquerosos trabajos enfundados en sus asquerosos trajes dentro de sus asquerosos coches caros. No quieren que esos jóvenes hippies que solo saben emborracharse y drogarse les molesten. Por eso nos clavan leyes de civismo que no nos dejan beber en la calle y que nos cierran los bares a las 3h. ¿Qué podemos hacer después de las 3h? No podemos estar en los bares ni en la calle, no pensamos pagar 12€ por una discoteca (que casualmente pueden cerrar a las 5h) y tampoco irnos a casa. Queremos divertirnos.
También nos ilegalizan la marihuana, que se utiliza con fines curativos, que se ha demostrado científicamente que no es tan mala como el tabaco o el alcohol y que legalizarla no llenaría nuestro país de drogadictos (como algunos creen), sino que hasta sería positivo (se reducen las mafias); como pasa en Holanda. Pero bueno, este tema va aparte.
Hablando de perjudicar a unos y a otros no, ¿por qué sí que se puede beber en las terrazas de los bares aunque estén la calle? Será por qué en los bares cada copa vale 5€ y parte de ese dinero va al estado, en cambio los estudiantes casi no pagan impuestos. No hay que joder al que paga. Por eso también han subido los impuestos al alcohol y al tabaco. Claro, los estudiantes son los que más fuman y beben (y a mucha honra). Además, como ya he dicho antes, nos cierran los bares a las 3h mientras que las discotecas a las que van los niños de papa que pueden gastar 24€ (12€ sábado, 12€ domingo; más si sale entre semana o se quiere uno emborrachar) en una semana, las dejan cerrar a las 5h.
Hay que hacerles recordar: Ellos también fueron jóvenes, también se rebelaron por lo que creían, ellos también se divirtieron, se emborracharon y hasta seguro que también fumaban porros. ¿Tanto les cuesta intentar entendernos? Saldrían ganando, seguro.
De los jóvenes depende el futuro de los que hoy gobiernan. No conviene intentar jodernos.
Sábado 18 de marzo de 2006
Actualización (21 de marzo del 2006):
Huracán etílico