jueves

80 aniversario de la II República

Hoy, 14 de abril, se cumple el 80 aniversario de la II República Española. Esperemos que no haya dos sin tres.
Aprovecho además este momento para intentar concienciar del gran problema que tenemos: Un sistema bipartidista y corrupto que solo responde ante el dinero. Pero lo más grave es que tenemos lo que nos merecemos. Si estás cansado de toda esta basura, haz algo de un puta vez. No les votes.
La democracia ha muerto. ¡Larga vida a la democracia!

viernes

Antes que nada, debo una disculpa a mis lectores. Hace seis meses que no publico nada. Y hubiera seguido así de no ser por un comentario de jotadé de Zapillo Street en el que me preguntaba si aún estaba vivo. Apenas, mi querido jotadé, apenas. En mi defensa solo puedo decir que estoy volviendo a centrarme en los estudios, además de seguir con el curro y (ahí va la bomba), ahora tengo novia. Lo siento chicas. La buena noticia es que a raíz de este último mensaje he empezado a plantearme ciertas cosas y he decidido a volver a escribir regularmente. Me costará recuperar mi inconstante pero pasional ritmo de antaño, pero prometo esforzarme para volver a hacer de este un blog digno.

jueves

Milagros

"Cuando la noche se vuelve verdadera no hay refugio para las almas en pena", como dice aquel. Pero empecemos por el principio. Nunca antes había bebido, yo era un buen chico; estudiaba mucho y ayudaba a mi madre, esa clase de mierda. Todavía no sé por qué lo hice, no tiene mucho sentido, pero la cuestión es que lo hice. Después del primer chupito de alcohol de caña, el más fuerte del lugar según dicen, fuego en mi garganta. Después del segundo, fuego en mi cabeza. Apenas conocía a toda esa gente, no sabía por qué estaban ahí ni quería saberlo, solo quería que dejaran de mirarme. "¿Puede alguien decirme por qué se mueve todo? ¿Estamos en un barco?" Dije riendo a carcajadas. "Un momento. ¿Es esa mi voz? ¿Qué me pasa?". Necesitaba aire, y lo necesitaba ya. Salí del bar tropezando con un taburete. Todo el mundo reía y, como martillos hidraúlicos las risas rebotaban en mi cabeza. Una vez y otra hasta que choqué con la puerta y caí de morros fuera del bar. En ese momento apenas sentí dolor, pero más tarde lamentaría, y mucho, esa caída. Me levanté apoyándome en la pared. Dando tumbos salí del callejón y me apoyé en una valla publicitaria, de esas que no te dejan cruzar los semáforos atajando en diagonal. Respiré profundamente. Si mi mente analítica no fallaba, estaba borracho. "¿Cómo puedo ser tan gilipollas?", pensé. Oí unos ruidos detrás, había gente cruzando el semáforo. Me giré para mirar y por un momento creí perder el equilibrio. ¡Oh, sorpresa mía al descubrir a Luis, uno de los pocos compañeros de clase que me caían bien! Me miró extrañado y sonrió. Iba con un grupo de gente, algunos los conocía, otros no, pero se veía a la legua que todos eran gente guay; la clase de gente que nunca se juntaría conmigo. Al pasar a mi lado Luis se paró a saludarme y yo, intentando con esfuerzo no caerme en el intento, le di un efusivo abrazo. "¿Estás borracho?" me preguntó riendo, y esa pregunta que normalmente me hubiera perturbado haciéndome huir con la cola entre las piernas, ahora me parecía la pregunta más obvia y fantástica del mundo. Con un contundente "sí" empezó la noche más fantástica de mi vida (y por ende, la peor mañana de sábado que habría de conocer, pero eso es harina de otros costal), y todas las cosas que creí tener claras dejaron de estarlo, pues no todo es blanco o negro, bueno o malo; y resulta que no soy tan listo como creía. Milagros del alcohol. Amén.

sábado

Una historia IV

Capitulo IV: La Casa

Caminamos por callejuelas estrechas de un antiguo pueblo que había sido absorbido por la ciudad y, habiendo perdido toda identidad solo quedaban callejuelas lúgubres y placitas abandonadas a los camellos. Totalmente acogedor, aunque no era mal sitio para pasar desapercibido una temporada. Después de un par de giros sin sentido aparente llegamos a un portal de madera vieja. Dos golpes, pausa, tres golpes, pausa, un golpe. Una mirilla se abrió y unos ojos oscuros, rasgados y profundos nos miraron a ambos. Unos ojos preciosos.
- ¿Quién es? -preguntó una voz dulce con tono cortante, escondiendo todo rasgo de ternura bajo una dureza capaz de aplastarte como a un molesto mosquito. Atreyente y peligrosa, una de mis combinaciones preferidas.
- Abre, nos podemos fiar. -El chico habló como alguien respetado.
La chica volvió a mirarme.- ¿Respondes tú por él? -Le preguntó preocupada a Dedos.
- Sólo él responde de si mismo, -sentenció- y si sabe lo que le conviene no hará tonterías.
La mirilla se cerró y se oyeron unos ruidos metálicos detrás de la puerta. Al abrirse comprové que ni la voz, ni los ojos mentían; me encontraba ante uno de los seres más perfectos que había contemplado. Pequeña, frágil, una negra cabellera de niña buena escalonada al azar, piel blanca como la luna profanada por tatuajes infernales, los labios invitaban a entrar pero no prometían que fuera agradable, una nariz pequeña y las orejas atravesadas con tachuelas e imperdibles, movimientos secos y precisos, una perfecta máquina de matar y amar, enfundada en ropa sencilla y funcional aunque muy gastada. Me miró como si apenas pudiera resistir la tentación de desgarrar mi cuello con sus manos y se dio la vuelta.
La puerta, que desde fuera parecía vieja y blanda, por dentro estaba reforzada con varias placas de metal y una serie de barras que se anclaban al suelo y paredes con un intrincado mecanismo. El sitio, mal iluminado y sin decoración, estaba limpio. Un estrecho pasillo que acababa en unas escaleras y éstas en una puerta de madera. Subí tras ellos y accedimos a una sala enorme. Originalmente había sido un pequeño apartamento, pero se veían marcas allí donde habían tirado paredes y había quedado reducido a una sala irregular, al fondo había tres marcos sin puerta que daban a un pasillo que transcurría paralelo al lado más alejado de la puerta. Las ventanas de la calle, que desde fuera parecían cerradas, estaban tapiadas con ladrillos y toda la estancia estaba iluminada con un fluorescente que cruzaba la estancia en diagonal. Desperdigados por el suelo había algunos colchones con sábanas blancas y en un lado baules metálicos, aquí y allá un sofá o dos y un par de mesas de madera con taburetes. Desperdigados por la sala personajes fantasmales, desarreglados y decrépitos. Sorprendentemente estaba limpio y olía a desinfectante.
La chica cerró la puerta detrás suyo y la oí bajando las escaleras. El chico me señaló un tabuerete en la mesa vacía y se fue por el pasillo. Mirando con más antención pude ver gente de toda clase. Miradas tristes en hombres a los que la vida había tratado como a perros, niños perdidos en un mundo que no era el que ellos soñaban, extranjeros de piel oscura que buscaban el paraíso y solo encontraron el infierno y entre ellos gente como Dedos que habían hecho de éste su modo de vida, al margen de la sociedad, y parecían satisfechos con su situación. El chico volvió con dos vasos de latón y se sentó delante mío. Una especie de cerveza semitranslúcida y de color terroso, al probarla su sabor era amargo, fuerte, con un regusto frutal y picante.
- ¿Te gusta? -Preguntó sonriente.
- Es... -No sabía del todo que decir.- extraño, fuerte.
- Sí, lo hacemos nostros. -Explicó.- La base es la de la cerveza, pero hechamos lo que encontramos. Cada cosecha es diferente. Pero todas dan energía y si bebes demasiado al día siguiente tu cabeza parece apunto de explotar.
- ¿Dónde estoy?
- Directo. -Se puso serio.- Veamos, me gusta imaginármelo como la casa de los que no tienen casa, un refugio para los deserhedados, el último rincón de la libertad.
- Muy bonito, pero que significa eso.
- Somos como una familia, cuidamos unos de otros, y este es nuestro hogar. La mayoría de los que están aquí es lo único que tienen.
- ¿Y qué pinto yo en esto? -Dije sacando un cigarrillo.
- Aquí no se puede fumar. -Me dijo.
- ¿En serio? -Pregunté sorprendido- Con todo ese rollo de libertad que lleváis.
- Aquí dormimos y comemos. De momento aguanta y escucha. -Volví a esconder el cigarrillo a desgana y el siguió hablando.- Simplemente tienes pinta de necesitar un hogar y una familia.
- No necesito que nadie cuide de mí, ¿y qué sacáis vosotros de todo ésto?
- Nunca vienen mal un par de manos.
- ¿Sin dinero?
- Sin dinero.
- No os conozco de nada, podríais ser una panda de locos.
- Mira, ¿por qué no me escuchas? -dijo Dedos sonriendo- Si no te parece bien te piras y nunca nos volvemos a ver.
- Está bien, -Respondí resignado.- Cuéntame.
- Camas, comida y bebida, lavadora y baño; todo incluido. Todo el asunto lo gestionamos Mayo, la chica de abajo; los hermanos Toro, a los que ya conocerás; y Dedos, yo mismo. Si te quedas, deberás colaborar en todo lo que te pida cualquiera de nosotros, hay que ganarse el pan. Ahora mismo estamos en la sala común, aquí se duerme y se come, si te quedas te asignaremos una de esas taquillas. -Se levantó y me hizo una señal con la cabeza para que lo siguiera. Nos dirigimos al pasillo, abrió la primera puerta a la derecha y había un pequeño pasillo con una puerta a cada lado- Retretes y duchas, son mixtas, pero nos comportamos. -Seguimos por el pasillo. La siguiente puerta estaba abierta y pude ver una cocina de butano y una nevera.- Cocinamos a las dos y a las nueve, aparte de eso puedes hacerte lo que quieras, cuando te venga en gana. Hay comida para celíacos y para veganos; agua y engrudo, que es como llamamos a lo que has bebido antes. -Señaló la siguiente puerta.- Esa es La Sala, en mayúsculas, pero no entraremos. Ahí puedes hacer absolutamente lo que quieras mientras no molestes a nadie. Está insonorizada y con extractores de humo. -Para acabar me indicó la última puerta, al final del pasillo.- Y eso es la terraza.
Me miró, sonrió y dijo.- ¿Qué te parece, te quedas con nostros?

viernes

Anarquía

El anarquismo defiende la liberación de la mente humanda del dominio de la religión, la liberación del cuerpo humano del dominio de la propiedad, la liberación de los grilletes y ataduras del gobierno. El anarquismo defiende un orden social basado en la libre agrupación de individuos con el proposito de producir verdadera riqueza social, un orden que garantice a cada humano el acceso sin restricciones a la tierra y la libre satisfación de las necesidades de su vida, acordes con los deseos, gustos e inclinaciones personales.

Emma Goldman (traducción libre)

sábado

Una historia III

Capitulo III: El chico del ukelele

Salí del enésimo hostal para turistas de mochilas de la guia. Llevaba toda la tarde caminándome la ciudad de hostal en hostal y en el fondo todos eran iguales: habitaciones compartidas, recepcionistas sonrientes y desayuno incluído a un precio que yo no podía pagar. Estaba anocheciendo, y yo, cansado, me senté en un banco de una plaza cercana. Encendí un cigarrillo y el humo errático en el atardecer parecía una caricatura de mí, dando vueltas sin saber donde ir. Las notas punzantes de un ukelele salieron de detrás de un arbusto. Una melodía melancólica y rasgada, jamás hubiera pensado que un instrumento de juguete pudiera tocar algo tan real.
- ¿Tienes problemas, extranjero? -Preguntó un joven sucio que se camuflaba entre las plantas.
- Más bien contratiempos.
- Me gusta tu cara, es... exótica -dijo con un tono de voz misterioso.
- No sé que te habrás pensado -dije preocupado, levantándome- pero no me va tu rollo.
- Cállate y siéntate. -Me ordenó sin parar de tocar esa curiosa melodía. Así lo hice y continuó con voz más calmada.- ¿Me invitas a un cigarrillo de esos?
Me levanté y le acerqué el cigarrillo. Paró un momento de tocar para encenderlo y me extendió la mano.
- Me llaman Dedos, -se presentó- ¿y a ti?
- A mí no me llaman. -contesté seco, mientras el continuaba tocando- ¿Viene del ukelele?
Me miró extrañado.- El nombre -Aclaré.- viene de que tocas el ukelele.
Sin responder a la pregunta y sosteniendo una nota con la diestra sacó mi cartera de su bolsillo con la mano libre y me la lanzó.
- Entiendo. -Respondí.
- ¿Qué haces aquí?
- Fumar en un banco, ¿y tú?
- Tocar el ukelele. ¿Dónde vives?
- Donde pueda.
- Ahá. -Respondió, aunque no parecía del todo satisfecho con mi respuesta y continuó- ¿Tienes dónde dormir?
- No.
- Conozco un sitio, -dijo levantándose y colgándose el instrumento al hombro- sígueme.
No me moví del banco, acababa de conocer a ese chico y viendo lo visto, no me fiaba mucho de él.
- ¿Qué ocurre? -preguntó.
- Las manos quietas. -y añadí- En todos los sentidos. -No tenía claro si aquel chico era el mejor ladronzuelo que había visto o tan solo un homosexual que tocaba el ukelele. Fuera como fuera quería sus manos lejos de mí.
- Prometido. -Dijo sonriendo con dos dedos levantados.- Aquí estarás a salvo.

Vuelta

Reabro este blog después de casi un año de inactividad. No daré explicaciones, las cosas van así.
Empezaré continuando Una historia y intentaré publicar a menudo. Si tuviera sentimientos os diría que lo echaba de menos.

domingo

Humo sedoso en la fria noche. Los minutos pasan y un cigarrillo da paso a otro y luego a otro. Lentamente me hundo en un limbo de frio y calor y humo en la oscuridad. Recuerdos y soledad. Oigo una voz en la lejanía que me susurra palabras que no puedo comprender pero que entiendo. Quiero escapar, huir a un lugar cálido donde no tener que lidiar con mis pensamientos; pero no puedo moverme de la cama, estoy atrapado en un mar de sábanas y de humo que perfora mis pulmones. Quiero huir a la cálida noche donde la brisa me acaricia y la luz de la luna acuna, pero estoy atrapado bajo estas cuatro paredes, rodeado de fantasmas de humo. Doy un trago de Jack Daniels y fumo otro cigarrillo, después me hago una paja; pero el whisky no sabe a nada, el tabaco no me consuela y los orgasmos duelen; nada es lo mismo, nada me satisface. Quiero sentir, quiero volver.

Recuerdos de piernas entrelazadas. Recuerdos de duchas cálidas. Dormir y despertar, ver y tocar. Recuerdos de sonrisas. Recuerdos de caricias. Recuerdos que se clavan en mi piel como un millar de agujas y que al abrir los ojos desaparecen en la oscuridad.

Un perro ladra, una televisión más allá, un coche pisa un charco. Todo es absurdo, nada tiene sentido. Solo son ruidos, no son más que vibraciones en el aire. Todo está vacío de significado, nada es real.


Oigo el Claro de Luna de Beethoven, la música proviene de todas partes y de ninguna, pero es real. Puedo sentir que es real. Viene del mar, atraviesa la oscuridad y el humo y llega hasta mi pecho, lo hace vibrar con cada nota. Me siento bien.







La música empieza a suavizarse hasta desaparecer con una última nota perfecta. Vuelvo a estar solo, pero por fin puedo dormir tranquilo porque ahora sé que en algún lugar más allá del mar hay algo real.

miércoles

Manifiesto en defensa de los derechos fundamentales en internet

Ante la inclusión en el Anteproyecto de Ley de Economía sostenible de modificaciones legislativas que afectan al libre ejercicio de las libertades de expresión, información y el derecho de acceso a la cultura a través de Internet, los periodistas, bloggers, usuarios, profesionales y creadores de internet manifestamos nuestra firme oposición al proyecto, y declaramos que…

1.- Los derechos de autor no pueden situarse por encima de los derechos fundamentales de los ciudadanos, como el derecho a la privacidad, a la seguridad, a la presunción de inocencia, a la tutela judicial efectiva y a la libertad de expresión.

2.- La suspensión de derechos fundamentales es y debe seguir siendo competencia exclusiva del poder judicial. Ni un cierre sin sentencia. Este anteproyecto, en contra de lo establecido en el artículo 20.5 de la Constitución, pone en manos de un órgano no judicial -un organismo dependiente del ministerio de Cultura-, la potestad de impedir a los ciudadanos españoles el acceso a cualquier página web.

3.- La nueva legislación creará inseguridad jurídica en todo el sector tecnológico español, perjudicando uno de los pocos campos de desarrollo y futuro de nuestra economía, entorpeciendo la creación de empresas, introduciendo trabas a la libre competencia y ralentizando su proyección internacional.

4.- La nueva legislación propuesta amenaza a los nuevos creadores y entorpece la creación cultural. Con Internet y los sucesivos avances tecnológicos se ha democratizado extraordinariamente la creación y emisión de contenidos de todo tipo, que ya no provienen prevalentemente de las industrias culturales tradicionales, sino de multitud de fuentes diferentes.

5.- Los autores, como todos los trabajadores, tienen derecho a vivir de su trabajo con nuevas ideas creativas, modelos de negocio y actividades asociadas a sus creaciones. Intentar sostener con cambios legislativos a una industria obsoleta que no sabe adaptarse a este nuevo entorno no es ni justo ni realista. Si su modelo de negocio se basaba en el control de las copias de las obras y en Internet no es posible sin vulnerar derechos fundamentales, deberían buscar otro modelo.

6.- Consideramos que las industrias culturales necesitan para sobrevivir alternativas modernas, eficaces, creíbles y asequibles y que se adecuen a los nuevos usos sociales, en lugar de limitaciones tan desproporcionadas como ineficaces para el fin que dicen perseguir.

7.- Internet debe funcionar de forma libre y sin interferencias políticas auspiciadas por sectores que pretenden perpetuar obsoletos modelos de negocio e imposibilitar que el saber humano siga siendo libre.

8.- Exigimos que el Gobierno garantice por ley la neutralidad de la Red en España, ante cualquier presión que pueda producirse, como marco para el desarrollo de una economía sostenible y realista de cara al futuro.

9.- Proponemos una verdadera reforma del derecho de propiedad intelectual orientada a su fin: devolver a la sociedad el conocimiento, promover el dominio público y limitar los abusos de las entidades gestoras.

10.- En democracia las leyes y sus modificaciones deben aprobarse tras el oportuno debate público y habiendo consultado previamente a todas las partes implicadas. No es de recibo que se realicen cambios legislativos que afectan a derechos fundamentales en una ley no orgánica y que versa sobre otra materia.

Compártelo.

lunes

Después de un mes y medio sin publicar nada no tengo otro remedio que pedir disculpas a mis lectores. No os he abandonado, no os he olvidado. Simplemente he estado muy liado: clases, busqueda de piso (de nuevo), trabajo, exámenes... y más cosas han tenido mi mente y cuerpo ocupados.
Prometo que ahora que las cosas se tranquilizan un poco volveré a publicar, tengo cosillas a medio escribir y relatos en mente que pueden acabar en algo decente, ya veremos. En todo caso, me pasaré más por aquí.